La corrosión interna es una de las mayores preocupaciones en el mantenimiento de las botellas. Durante la inspección visual el técnico mirará dentro de tu botella para detectar corrosión. Si ésta existe puede necesitar ser granallada/lavada químicamente para quitar los restos de óxido. La humedad es la principal causa de corrosión interna. Para prevenir que el agua entre en tu botella, debes llenarla en una estación de aire de confianza y guardar las botellas con algo de presión (15-20 bar).